Después de suspender sus conciertos en Santiago debido a fallas técnicas, Shakira salió al encuentro de sus fans frente a su hotel, brindándoles una interpretación espontánea y reafirmando su cariño por ellos.
La cantante colombiana Shakira, conocida por su energía y conexión con el público, enfrentó recientemente una situación desafiante en Santiago de Chile. Programada para presentarse los días 2 y 3 de marzo en el Estadio Nacional como parte de su gira “Las mujeres ya no lloran World Tour”, se vio obligada a cancelar ambos conciertos debido a problemas técnicos que comprometían la seguridad del espectáculo. Sin embargo, la artista no dejó que esto afectara su relación con sus seguidores y les ofreció una sorpresa inolvidable.
Problemas técnicos y cancelación de conciertos
El primer concierto, previsto para el 2 de marzo, fue suspendido apenas seis horas antes de su inicio. La razón principal fue que el suelo donde se instaló el escenario de 62 toneladas estaba desnivelado y no estabilizado adecuadamente, lo que ponía en riesgo la seguridad de la artista, su equipo y el público. Shakira expresó su pesar en redes sociales, mencionando que tenía “el corazón partido en mil pedazos” por no poder presentarse y aseguró que la seguridad es su máxima prioridad.
El segundo concierto, programado para el 3 de marzo, también fue cancelado por las mismas razones. La productora local, Fenix Entertainment, emitió un comunicado explicando que, debido a inconvenientes técnicos ajenos al artista y su producción, el suelo donde iría el escenario se encontraba desnivelado, impidiendo el correcto desarrollo del concierto.
Un gesto inesperado para sus seguidores
A pesar de las circunstancias adversas, Shakira demostró su compromiso y cariño hacia sus fans chilenos. El 3 de marzo, alrededor de las 21:30 horas, salió al frontis del hotel Mandarín Oriental, donde se hospedaba, para ofrecer una actuación improvisada. Acompañada por parte de su banda y equipo de seguridad, interpretó “Antología”, una de las canciones más emblemáticas de su álbum debut “Pies descalzos” de 1995. Los seguidores, que llevaban horas esperando, recibieron con entusiasmo este gesto, agradeciendo la cercanía de la artista.
Este acto espontáneo no solo alivió la decepción de los fans por la cancelación de los conciertos, sino que también reforzó la imagen de Shakira como una artista cercana y comprometida con su público. A pesar de no poder realizar los espectáculos programados, la cantante buscó la manera de conectar con sus seguidores y brindarles una experiencia memorable.